Cecil
Rhodes, empresario inglés; 1895. “Ayer estuve en el East-End
londinense (barrio obrero) y asistí a una asamblea de los sin
trabajo. Al oír en dicha reunión discursos exaltados cuya nota
dominante era: pan, pan… y al reflexionar, cuando regresaba a casa,
sobre lo que había oído, me convencí más que nunca, de la
importancia del imperialismo… La idea que sostengo representa la
solución del problema social: para salvar a los cuarenta millones de
habitantes del Reino Unido de una guerra civil funesta, nosotros, los
políticos coloniales, debemos tomar posesión de nuevos territorios
para colocar en ellos el excedente de población, para encontrar
nuevos mercados en los cuales colocar los productos de nuestras
fábricas y de nuestras minas. (…) Si no queréis una guerra civil,
debéis convertiros en imperialistas."
Jules
Ferry- Ministro de Relaciones Exteriores de Francia – Discurso,
Cámara de Diputados, 28 de julio de 1885 “Se puede relacionar el
sistema de expansión colonial con tres tipos de ideas: ideas
económicas, ideas de civilización (...) e ideas de orden
político y patriótico. Lo que le falta a nuestra industria (…),
lo que más le falta son mercados. La ley de la oferta y la demanda,
la libertad de intercambios, la influencia de la especulación, todo
eso alcanza un radio que se extiende hasta la otra punta del mundo
(...). Es preciso buscar mercados. Para los países ricos las
colonias son un lugar muy ventajoso para la colocación de capitales.
(…) El problema colonial es, para los países consagrados por la
naturaleza misma de su industria a una gran exportación, el problema
de los mercados (…) la fundación de una colonia constituye la
creación de un mercado… [Sin embargo] hay un segundo punto: se
trata de la vertiente humanitaria y humanizadora (...); las razas
superiores tienen un deber hacia las razas inferiores; tienen el
deber de civilizar a las razas inferiores
(...).
Príncipe Von Bulow - Discurso pronunciado en el Reichstag
(Alemania) el11 de diciembre de 1899 «El rápido crecimiento de
nuestra población, la expansión de nuestra industria, el valor de
nuestros negociantes, en una palabra, la pujante vitalidad del pueblo
alemán nos ha situado en medio de los movimientos políticos y
económicos del mundo. Si los ingleses hablan de una Gran Bretaña,
si los franceses hablan de una Nueva Francia, y si los rusos
progresan en Asia, nosotros también tenemos derecho a reclamar una
gran Alemania (...). Señores, no se ha descubierto aún la forma de
triunfar en la lucha por la vida sin una fuerte coraza sobre la
tierra y sobre el mar, sobre todo si se trata de un pueblo de casi
sesenta millones de almas fijadas en el centro de Europa.»
Discurso
de Guillermo II (emperador alemán), a su ejército que partía para
China, el 27 de julio de 1900. “A no dar cuartel. A no tomar
prisioneros. Llevad la guerra de tal modo que dentro de mil años
ningún chino se atreva a mirar siquiera a los ojos a un alemán.”
Discurso
del senador norteamericano, Beveridge. Boston, 27 de abril de 1898
“No son capaces de ejercer un gobierno propio. ¿Cómo podrían
serlo? No forman una raza capaz de gobernarse a sí misma. (…) Dios
no ha venido preparando durante mil años a los pueblos teutónicos y
de habla inglesa para una vana actitud de autocontemplación y
autoadmiración. No. Nos ha convertido en organizadores magistrales
del mundo para imponer el sistema allí donde reina el caos. (…)
Nos inclinó al gobierno para que podamos gobernar a los pueblos
salvajes y seniles. Si no fuera por esta fuerza el mundo recaería en
la barbarie y en la oscuridad. Él señaló al pueblo norteamericano
como a la nación elegida, para que dirija la regeneración del
mundo.”
EJERCICIO
1.
Explica
– CON TUS PALABRAS- qué argumentos utiliza cada uno de estos
personajes para justificar e impulsar la colonización de nuevos
territorios. Clasifica cada uno de esos argumentos (si son
económicos, sociales, raciales, políticos, etc.)
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