lunes, 22 de octubre de 2018

BATLLISMO


BATLLISMO

Se caracterizó por:
La defensa del capitalismo, que jamás cuestionó la propiedad privada de los medios de producción.
Un fuerte intervencionismo económico. Los servicios públicos esenciales debían estar en manos del Estado, ya que éste era el organismo representativo de la sociedad. El Estado debía intervenir donde el capital privado fuera indeciso o temiera perder dinero, porque no estaba guiado por el afán de lucro sino de servicio público. Además, el Estado debía sustituir a las empresas extranjeras que se llevaban la ganancia fuera de fronteras debilitando así el país.
Un moderado proteccionismo.Una legislación laboral y de seguridad social avanzada.
Un fuerte anticlericalismo expresado en la separación total entre la Iglesia Católica y el Estado.
Una concepción de la vida social tomada parcialmente del humanismo, que se expresó en diversos órdenes, desde la ley de divorcio por voluntad unilateral de la mujer, a la prohibición de las corridas de toros y cualquier otra forma de maltrato a los animales.
La reforma de la organización institucional del país, implantando el voto secreto y directo para la elección del Poder Ejecutivo y transformando a éste en un órgano colegiado.
Batlle no aceptaba ningun determinismo para el hombre. Su inmensa fe en los progresos del ser humano marcó su autentico humanismo. Consideraba que, como ser racional, el hombre era libre y contaba con la voluntad suficiente para ser su propia historia de acuerdo con sus ideas. Sostenía que en una estructura liberal democrática el hombre era capaz de llevar a cabo cambios sociales sin tener que recurrir al uso de la violencia, la revolución o el determinismo económico de las teorías socialistas. Al ser partidario del racionalismo espiritualista, era contrario a todas las religiones reveladas, especialmente el catolicismo, que predominaba en nuestro país. Contrario a la pena de muerte, logró su suspensión.
Si no se convertía a cada hombre en un ciudadano instruido capaz de reflexionar, no se podía esperar que interviniera activamente en la vida política. Esta idea, base de la democracia directa del pueblo, era sobre la que se basaba.
ECONOMIA:
La economía del primer batllismo y los años veinte ofrece una visión de la economía uruguaya entre el inicio de la segunda presidencia de José Batlle y Ordóñez en 1911 y la crisis de los años 30. Es el momento de auge del modelo agroexportador y a la vez el inicio de una larga transición desde la economía agroexportadora –asediada por las crisis externas y por sus propias restricciones- hacia otro modelo económico y social que se terminaría de configurar recién hacia fines de la Segunda Guerra Mundial. Entremedio, el Estado uruguayo asumió un renovado rol; en contraste con el incipiente estancamiento ganadero, los servicios urbanos muestran una extraordinaria expansión, que supera al ritmo de crecimiento de la industria. Son también los años de auge del “primer batllismo”, con su vasto proyecto reformista, sus logros perdurables, sus notorios fracasos. 
Propugnaba un país de clases medias en el que “los ricos fueran menos ricos para que los pobres fueran menos pobres” y consideraba que ese ideal sólo podía lograrse por medio de la acción de un Estado intervencionista y redistribuidor.



POLITICO:
Batlle pide o pretende hacer una politizacion de la sociedad. Esto quiere decir que toda la sociedad participie activamente de la politica. Para ello hay que involucrarse con los partidos politicos ya creados o creando nuevos. En este período la mujer empieza a involucrarse y aparecen las primeras mujeres en los cargos de gobierno.
El partido para poder funcionar mejor, para poder transmitir las inquietudes y los deseos de la ciudadanía tiene que estar organizado y vinculado con esta, para poder lograr esto se tomo se decidió organizarse de determinada manera: en cada barrio de la ciudad se instalaba una cede de cada partido que los representaba llamados club seccional.  A estos lugares las personas podían acercarse para plantear sus pensamientos, colaborar y en si vincularse con este.